"Las cosas se mueven tan rápido como el proveedor menos afortunado y menos competente que conozcas". - Elon Musk
Lo peor son los proveedores de tu cadena de suministro que no conoces. La ignorancia es una bendición... hasta que no lo es.
Se dice que el riesgo es lo que queda cuando crees que has pensado en todo. La suerte está en que el riesgo no se manifieste. Al igual que la esperanza no es una estrategia, la suerte no es una táctica en la que deban confiar los fabricantes.
2020 fue un año difícil. Al terminar, había esperanza de que el mundo volviera a la normalidad para los fabricantes. Esto no ha sucedido, como lo demuestran las interrupciones provocadas por las tormentas en Texas, los nuevos cierres totales por COVID-19 en Francia y el barco que bloqueó el Canal de Suez. Al mismo tiempo, con un enorme suspiro de alivio, al menos podemos ver la luz al final del túnel con respecto a la pandemia de COVID-19.
¿Y ahora qué? La mayoría de los fabricantes han sobrevivido a la pandemia, pero ¿significa eso que nuestras cadenas de suministro están sanas? ¿Hasta qué punto es sólo suerte? Aunque queremos seguir adelante y volver a los negocios, el año 2020 nos hizo un regalo en forma de prueba de estrés para nuestras cadenas de suministro. Podemos ignorarlo por nuestra cuenta y riesgo, o aprender de él. Hay algunas certezas. Habrá más disrupciones y no serán iguales a la última. Se puede tener suerte a veces, pero no se puede tener suerte todo el tiempo.
QAD Tomorrow es una corriente de pensamiento online diseñada para ayudar a los fabricantes a comprender los desafíos de la cadena de suministro, las causas fundamentales y las mejores prácticas para superarlos. Cuando se piensa en las cadenas de suministro, la eficiencia, la agilidad y la resiliencia (cómo respondemos a las disrupciones) son factores clave. Muchos fabricantes, teniendo en cuenta sus procesos actuales, consideran que se trata de concesiones. Reimaginando nuestros procesos y aprovechando las mejores prácticas, es posible aumentar la eficiencia, la agilidad y la resistencia simultáneamente. Al mismo tiempo, podemos minimizar las concesiones ya que, cuando se hace correctamente, pueden reforzarse mutuamente. Por ejemplo, tomemos el abastecimiento estratégico. La contratación de múltiples proveedores mediante un proceso escalable puede reducir los costes gracias a la competencia, aumentar la agilidad permitiéndote cambiar rápidamente la demanda a un proveedor que satisfaga tus necesidades cambiantes, y mejorar la resiliencia mediante la contratación de múltiples proveedores para reducir los puntos únicos de fallo.
Al pensar en las cadenas de suministro, es fácil ver los nodos (proveedores, fabricantes, distribuidores, mayoristas, minoristas, etc.) mientras se infravalora el papel de las conexiones entre cada uno y las diferencias normativas de un país a otro que abarca la cadena de suministro. Pasar de las relaciones transaccionales a las estratégicas, centrarse en la optimización de los costes en destino trabajando estrechamente con los socios de transporte y abordar de forma proactiva los aranceles, los impuestos y el cumplimiento de la normativa aprovechando las actualizaciones en tiempo real y la automatización pueden tener un profundo impacto en el rendimiento de la cadena de suministro.
La visión tradicional de las cadenas de suministro se centra en el flujo de materiales, principalmente descendente. Concentrarse en el flujo de información hacia arriba y hacia abajo de la cadena de suministro crea un carril sobre el que optimizar las prácticas de la cadena de suministro. Incluso la logística más eficiente está limitada por la distancia y la velocidad de un tren, un barco, un camión o un avión. La información, en cambio, puede moverse a la velocidad de la luz. La Gestión Integrada de Proveedores mejora la colaboración con los proveedores y la visibilidad de la cadena de suministro, lo que permite una respuesta más rápida a los cambios en la oferta y la demanda.
Acompáñanos el 19 de mayo en QAD Tomorrow para conocer los retos actuales de la cadena de suministro, sus causas y las mejores prácticas más recientes para abordarlos y superarlos. Conoce a los fabricantes y a los expertos en la materia. A continuación, realiza el Diagnóstico de Gestión Integrada de Proveedores para evaluar dónde te encuentras y cuál es la mejor manera de llegar a donde quieres estar.
