Las disrupciones actuales tienden a ser mucho más significativas y de mayor alcance. Las pandemias, los cierres de fronteras, las anomalías meteorológicas, los problemas geopolíticos, los bloqueos de las vías de distribución, la escasez de trabajadores y otros sucesos similares están llevando a las cadenas de suministro a su punto de ruptura. Estas disrupciones se producen cada vez con más frecuencia y causan estragos en todos los aspectos de las operaciones de la fabricación de alimentos y bebidas, especialmente en la cadena de suministro. Hoy en día, las cadenas de suministro deben ser ágiles y rápidas. Deben ser flexibles, resistentes y fáciles de reconfigurar para adaptarse a los cambios del mercado, de modo que los productos y los datos sigan fluyendo. Es fácil olvidar que hay dos canales de suministro que deben funcionar al unísono: el canal de suministro físico y el digital. Si uno falla o no está sincronizado con el otro, ambos fracasan.
Recientemente he mantenido una serie de conversaciones con miembros del equipo de QAD para determinar qué deben hacer los fabricantes de alimentos y bebidas para garantizar que sus cadenas de suministro sigan siendo ágiles y flexibles. A medida que nuestras discusiones evolucionaban, pusimos la cadena de suministro de alimentos y bebidas en el mismo contexto de un producto que la industria produce. Al igual que un producto alimentario y de bebidas de calidad necesita ingredientes críticos, también lo hace la cadena de suministro. Para seguir siendo competitivas, las empresas de alimentación y bebidas tienen que ofrecer productos de calidad que respondan a las preferencias siempre cambiantes de los consumidores. Las cadenas de suministro deben coordinarse estratégicamente y gestionarse tácticamente. La gestión de la cadena de suministro es, en realidad, más una filosofía y un proceso de pensamiento en evolución que se ha incorporado, que un simple proceso.
Las cadenas de suministro se han vuelto tan complejas que, para tener éxito, su gestión debe ser colaborativa e interactiva con todo el ecosistema, no sólo dentro de la organización. Para lograr esta transformación de proceso a filosofía, las organizaciones deben añadir tres ingredientes a la estrategia de gestión de la cadena de suministro.
Colaboración
Investigación
Evaluación
Estos tres ingredientes se centran en la información. Para gestionar con éxito tu cadena de suministro, el conocimiento es poder. En el mundo ultra tecnológico actual, el acceso a la información es más fácil que nunca. Sin embargo, a veces puede haber demasiada información sin tiempo suficiente para diseccionarla y tomar decisiones oportunas y acertadas. Ahí es donde entran en juego estos tres elementos como verdaderos ingredientes para mantener tu cadena de suministro ágil y adaptable a la disrupción y a las condiciones cambiantes del mercado.
La comunicación es fundamental para mantener la cadena de suministro en movimiento, y de nuevo nos referimos a la cadena de suministro de doble cara de producto e información. La comunicación y la colaboración no se limitan a las paredes de la empresa o de la organización. El mercado actual exige una colaboración total entre los socios comerciales y todas las organizaciones que tienen un impacto o participación en tu negocio. Proveedores, proveedores logísticos externos, fabricantes contratados, empresas de transporte y envío, así como los más obvios, tus clientes. ¿Y los clientes de tus clientes, los consumidores? ¿Por qué guardar un secreto? Cada una de estas entidades tiene un impacto significativo no sólo en el rendimiento de tu cadena de suministro, sino en tu negocio. ¿No deberías querer colaborar frecuentemente con todas ellas? Piensa en los datos que se pueden recopilar y, lo que es más importante, en la información y la capacidad de toma de decisiones que pueden surgir de esa colaboración. La colaboración es la clave para obtener ese conocimiento y, por tanto, obtener el poder de construir la cadena de suministro adaptable.
Como se ha mencionado anteriormente, hoy en día se dispone de una gran cantidad de datos que pueden ayudar a las empresas a gestionar sus cadenas de suministro y a colaborar, tanto interna como externamente, con socios comerciales como proveedores y clientes. La investigación es el segundo ingrediente necesario para ayudar a la cadena de suministro a adaptarse a un mercado en disrupción. Investigación es una palabra interesante. Los datos deben ser reales, precisos, fiables y, lo que es más importante, actuales. Hace años había una vieja frase sobre el negocio de las noticias: "Si tengo que esperar hasta el final del día para obtener información, más vale que espere toda la vida". Esto puede aplicarse también a la industria de fabricación de alimentos y bebidas.
Unos datos fiables, precisos y oportunos le permitirán tomar decisiones empresariales más inteligentes y rápidas. El mundo actual, rico en tecnología, nos ofrece cosas como la Industria 4.0, el Internet de las Cosas (IoT), la Inteligencia Artificial (AI) y el EDI, algunas de las cuales pueden utilizarse a disposición de una organización para poder acceder a la información y transmitirla. Estos datos expertos permitirán que las empresas se comuniquen e interactúen mejor que nunca para pedir ingredientes, fabricar productos y enviarlos a donde tengan que ir. Para hacerlo con éxito, los datos tienen que ser reales, como se dice. Contar con los procesos y sistemas necesarios para poder clasificar y analizar rápidamente todos los datos disponibles para determinar qué información es crítica y aplicable para un escenario determinado mantendrá en última instancia las cadenas de suministro en movimiento. La investigación es un componente clave.
Estamos experimentando volúmenes de datos disponibles sin precedentes, más de los que se pueden digerir manualmente de forma realista. Todos nosotros, en todos los ámbitos de la vida, estamos bebiendo de la proverbial manguera de datos. Los datos de la cadena de suministro en la fabricación de alimentos y bebidas no son diferentes. En las empresas, los retos que plantean los datos son mayores: no todos los datos están estructurados y una gran cantidad no está organizada, no todos los datos son relevantes y no todos los datos son de calidad para la toma de decisiones. Los datos cambian en tiempo real y su volumen no deja de aumentar. Esta gran cantidad de datos ofrece a los fabricantes la oportunidad de aprender de ellos. Una vez más, lo hemos dicho reiteradamente, el conocimiento es poder. Para hacer el mejor uso de estos datos, la evaluación es el componente clave para asegurar que la mejor información está disponible para tomar decisiones informadas.
Para llevar a cabo el proceso de evaluación de forma eficaz, hay una serie de tecnologías que pueden emplearse para realizar la tarea. La próxima generación de análisis de la cadena de suministro, el IoT y la IA suponen una oportunidad para que las organizaciones transformen su modelo de negocio utilizando soluciones conectadas. Para lograr la agilidad de la cadena de suministro, se necesita la capacidad de detectar, analizar y ejecutar las mejores decisiones empresariales posibles, independientemente de las fuentes de la oferta y la demanda. Para alcanzar este objetivo a través de la empresa, se necesita visibilidad de extremo a extremo. Esto requiere datos precisos y las herramientas adecuadas para evaluar esos datos. La rapidez y agilidad en la evaluación de los datos es tan importante como la rapidez y agilidad en la cadena de suministro real.
Es difícil tomar decisiones sin información. Es aún más difícil tomar buenas decisiones sin información precisa y oportuna. Una frase común en la industria cuando se habla de la disfunción de la cadena de suministro y las oportunidades perdidas es "un día tarde y un dólar menos". Esto implica que si no se tiene la capacidad de tomar decisiones rápidas y precisas, algo fallará. El movimiento del producto a través de la cadena de suministro sólo puede producirse si las cadenas de suministro física y digital están sincronizadas y quienes las gestionan están informados y tienen la capacidad de colaborar con todas las partes, investigar las oportunidades y evaluar todas las posibles decisiones de la cadena de suministro. Esto conduce a una cadena de suministro ágil y flexible que puede soportar la presión de las disrupciones en el mercado actual de alimentos y bebidas.
Mi colega de QAD, Ludovic Lezvenen, y yo profundizamos en estos tres ingredientes con una serie de blogs más detallados y el correspondiente webinar sobre cada ingrediente. Consúltalos para obtener más detalles sobre los tres ingredientes clave necesarios para mantener tu cadena de suministro en movimiento en el mundo disruptivo de hoy.
Artículo escrito por Stephen Dombroski